Divorcio

DIVORCIO

Divorcio

 

Causas generales del divorcio Pueden ser muchas, pero en la mayoría de los casos se trata de problemas de convivencia de los integrantes de la pareja, ya sea por la relación entre ellos o por factores externos a la pareja. Según la legislación de cada país, es causa de divorcio el mutuo disenso; la bigamia; el adulterio; el delito de un cónyuge contra otro; la enfermedad física o mental, que ponga en riesgo la vida del otro cónyuge; la violación de los deberes inherentes al matrimonio; injurias graves; abandono malicioso; etc. Son múltiples las causas de las cuales hacen depender los distintos ordenamientos la concesión del divorcio, así como las circunstancias y requisitos que deben concurrir para su apreciación, aunque puede hacerse una enumeración de las más importantes.

 

 

 

 

 

Estas son una serie de causas que pueden originar la disolución matrimonial y que van en perjuicio de las personas y de familias enteras:

 

1.- Falta de conocimiento de la pareja Cuando dos personas van a unir sus vidas deben conocerse mutuamente; deben entender que son dos seres distintos en cuanto a la formación que recibieron cada uno en sus hogares. Vale la pena conocer la forma de pensar de cada uno, sus gustos, sus cualidades y defectos, lo que no les agrada, lo que les hace daño en una relación y el tipo de vida que han tenido con sus padres. Deben saber que están en proceso de adaptación y que necesitan tiempo para entenderse mutuamente. Si esto no se da el matrimonio tarde o temprano fracasará.

 

2.- Falta de adaptación La vida cuando se está soltero es una; cuando se casa, es otra, de alguna manera cambia. Para adaptarse a la pareja se necesita madurez personal, disposición para no ser egoístas. Se necesitan ajustar las nuevas relaciones. Adaptar es ir acomodando las cosas de tal modo que las piezas de uno y de otro se vayan uniendo para bien. El matrimonio es una constante adaptación y si esto no se comprende, la relación corre peligro.

 

3.- El no ser fieles mutuamente Es difícil que una persona acepte a su pareja una vez que sabe que ésta le ha sido infiel. El cuerpo y el alma son el uno para el otro. Es difícil pensar que la esposa o el esposo hayan tenido relaciones extramaritales con una persona que es ajena a su matrimonio, entienda que fue una relación casual que no afecte su intimidad. La aceptación corporal es única e íntima y si alguien ajeno la rompe, no se tiene la conciencia de seguir con La misma actitud. La infidelidad mental puede llegar a maltratar el matrimonio y se da cuando las parejas están físicamente unidas pero su mente está en otra persona.

 

4.- El Machismo Se piensa que el hombre es el que tiene el poder sobre la mujer y que todo está sujeto a sus caprichos. Este pensamiento no es nuevo pues se ha dado durante toda la vida y es cuestión de cultura. Sólo el hombre es el que lleva las riendas y la mujer sólo escucha y hace lo que le dicen. Vencer el machismo se va dando cuando se da y se recibe, cuando se ofrece y acepta. Si la pareja no lo comprende no tardará mucho en fracturar un matrimonio 5 El alcoholismo Una persona alcohólica siempre causará un problema en un matrimonio porque derrochará lo que no se tiene y dejará a la familia al borde del abismo.

 

6.- Los maltratos Todo maltrato ya sea físico o psicológico atenta contra el respeto y la dignidad de la persona. Esto está bien claro y es incuestionable. Es increíble que existan relaciones donde desde el noviazgo el hombre le pega a la novia o la insulta causando un mal psicológico pero aún así se llega a consumar un matrimonio, porque “hay amor y eso no sucederá después”. Muchas veces este maltrato comienza a darse una vez que la pareja se ha casado pero se soporta tontamente porque existe un amor de por medio o unos hijos, aunque éstos estén sufriendo.

 

7.- Las amistades Pueden existir amigos que hacen que el matrimonio se venga abajo porque intrigan la relación entre los esposos. Hay que cuidar las amistades que se tienen desde antes en el noviazgo porque pueden confundir a la pareja en un matrimonio, y una vez que ya se han casado se debe cuidar esa relación amistosa de los dos porque puede darse el caso de que se crean malos entendidos que conllevarán a la duda y por ende al debilitamiento del matrimonio.

 

Divorcio

 

 

 

8.- El abandono de la casa Cuando por cuestiones de trabajo se tiene que separar la pareja se corre el riesgo de que la relación se enfríe y cause daños. Cuando una persona se tiene que ir a trabajar a otro lado se debe tener madurez para no caer en la tentación de un fruto prohibido, porque la distancia puede provocar un juego peligroso al acercarse a una persona ajena al matrimonio, que sin proponérselo puede cambiar el rumbo de la vida del otro.

 

9.- Los celos No todos los celos son malos porque se puede celar a la persona amada cuando se cuida, cuando se sienten amenazados por tercera personas, cuando se cuida el espacio de la casa, cuando se ama. Pero hay celos extremos que se vuelven necedad, celos que matan y lastiman cualquier relación, son los celos enfermos que se provocan por la inseguridad personal de las parejas, cuando se obsesionan indebidamente las cosas que rodean a las personas. Se vigila a la persona indebidamente dudándose en todo momento de la credibilidad del amor.

 

10.- La libertad mal entendida En la pareja se debe tener la libertad para decidir ciertas cosas porque las otras se deben tomar de manera mutua y conjunta. En el matrimonio de debe dar una apertura para el desarrollo personal sin olvidar que se está caminando al lado de la otra persona, que de alguna manera no se mueve por si sola como cuando es uno soltero. La libertad es mala cuando se aprovecha de ella para hacer cosas indebidas que lastiman a la pareja. Si se llega a pensar que es uno libre y que se puede hacer lo que se quiera se está completamente equivocado porque no se construye en un sentido de pertenencia. Una libertad mal entendida o mal creada confunde a la pareja y se torna en un ambiente de duda y desconfianza. Se es libre en la medida en que se respeta a la pareja.

 

11.- La extrema relación con los padres Hay hijos que siempre viven atados a la mamá o al papá y que difícilmente pueden vivir lejos de ellos. La dependencia de los hijos cuando se casan traen malas experiencias conyugales que rompen con la armonía de la pareja y no permiten la independencia matrimonial.

 

12.- La economía Se sabe que al amor con hambre no dura y esto se refleja a que los problemas económicos puede llevar al fracaso matrimonial. Toda ausencia de lo indispensable en la casa causa malestar y tiene un límite. El esposo trabaja pero no alcanza. Se hace el esfuerzo pero no es suficiente; la pareja tiene que trabajar pero al hacerlo se corre el riesgo de perder la convivencia y los objetivos comunes que se habían planteado.